La orientación del movimiento, la carga soportada, las dinámicas a garantizar, las condiciones específicas del entorno de producción, todo ello condiciona la elección de la guía telescópica correcta.
En los sistemas de automatización más avanzados, como los que incluyen máquinas industriales o almacenes automatizados, las guías telescópicas se utilizan para múltiples soluciones, incluidas las extracciones en voladizo de piezas móviles o cajas, cajones, horquillas telescópicas en AGV, y a menudo operan en condiciones críticas que incluyen la manipulación de cargas pesadas, ciclos estresantes o entornos muy contaminados.
Los diseñadores de movimiento lineal que quieran obtener los mejores resultados posibles deberán elegir la guía adecuada para cada aplicación. Además de las características técnicas, también tendrán que considerar algunas variables relacionadas con el perfil de uso y movimiento, por ejemplo:
• orientación de la pista
• tipo de carrera
• opciones de aceleración y mantenimiento
Disponer de la guía telescópica adecuada en las aplicaciones de automatización industrial permite obtener en todo momento las mejores prestaciones y garantiza el correcto funcionamiento de los sistemas de producción.
Las ventajas derivadas son evidentes en términos de reducción de los costes de mantenimiento y aumento de la productividad.
Algunos tipos de aplicaciones pueden requerir carreras variables o movimientos verticales. En otros casos, si las pistas no se someten a un endurecimiento o a tratamientos especiales, puede que no sean lo suficientemente fuertes como para soportar cargas pesadas; o pueden tener una baja resistencia a la corrosión o a la oxidación.
Por lo tanto, no todas las guías telescópicas son adecuadas para su uso en sistemas de automatización industrial, y la elección de un producto inadecuado puede hacer que todo el sistema pierda eficiencia y ralentice la producción.
Para elegir la mejor solución telescópica para el movimiento lineal, y así conseguir el mejor rendimiento y optimizar los costes, los diseñadores deben comprobar cuidadosamente las siguientes características.
Tipo de movimiento
Esto significa que el movimiento requerido puede ser:
• horizontal
• vertical
• carreras constantes
• variable.
Las guías telescópicas con jaula de bolas, por ejemplo, demuestran sus límites con carreras variables o usos verticales, debido al desplazamiento de la jaula.
En cambio, las guías telescópicas con rodamientos pueden garantizar en ambos casos un buen movimiento de deslizamiento y una larga vida útil.
Velocidad y aceleración
Una guía telescópica suele estar formada por una parte fija, una parte móvil y un elemento intermedio.
Para aplicaciones de dinámicas elevadas, este último elemento a menudo no se desliza con un rendimiento óptimo debido a la alta tensión.
Accesorios como los sistemas de sincronización y los amortiguadores ayudan a aumentar la eficiencia en aplicaciones como estas.
Fiabilidad en entornos difíciles
Las guías telescópicas en entornos industriales están casi siempre en contacto con contaminantes como residuos de producción, desechos o polvo.
Cuando el sistema funciona en entornos peligrosos, es conveniente utilizar guías telescópicas con rodamientos.
Los rodamientos de mayores dimensiones, además de ser más resistentes que otros sistemas de rodadura de menores dimensiones, permiten que el cursor se deslice sobre la pista con un rendimiento óptimo incluso en presencia de impurezas: el mayor tamaño del rodamiento simplemente «superará» cualquier obstáculo presente en la pista.
Duración del ciclo de vida y capacidad de carga
En las aplicaciones automatizadas, la pista de rodadura debe funcionar a menudo durante largos periodos, incluso millones de ciclos, con intervalos de mantenimiento lo más largos posible y bajo cargas pesadas.
Teniendo esto en cuenta, las características de los materiales que componen la guía adquieren una gran importancia: un proceso de endurecimiento de la pista de rodadura, como el templado por inducción o la nitruración profunda, puede proporcionar la dureza necesaria para afrontar mejor estas situaciones y prolongar la esperanza de vida de la guía.
Resistencia a la corrosión
Durante su funcionamiento, las guías suelen entrar en contacto con agua, líquidos y soluciones ácidas o básicas.
En estos casos, las soluciones de tratamiento superficial que ofrece el fabricante desempeñan un papel fundamental para garantizar una adecuada resistencia a la corrosión.
Intervalos de mantenimiento
Los sistemas de autolubricación, los depósitos de aceite de liberación lenta y los elementos de limpieza son complementos que prolongan considerablemente los intervalos de mantenimiento de las guías telescópicas y que, en ocasiones, incluso los hacen innecesarios.
Ni que decir tiene que este enfoque preventivo, que se basa en un diseño y unos tratamientos de superficie que ya son capaces de soportar condiciones de funcionamiento críticas, se traduce rápidamente en una ventaja de costes y rendimiento.
Desealineación
La alineación entre las partes móviles y fijas de una extracción no es siempre precisa.
A menudo se producen desajustes de varios milímetros que pueden reducir considerablemente la vida útil de las guías.
En estos casos es posible realizar costosas operaciones de rectificado de las superficies de apoyo, que a menudo duplican el tiempo y el coste de la instalación, u optar por una pista capaz de absorber las desalineaciones.
Guías Telescópicas Telerace: una apuesta segura
La gama de productos Rollon incluye una clase específica de guías telescópicas que ofrecen la mayor ventaja en el movimiento lineal de los sistemas de automatización: Telerace.
Las Telerace son guías telescópicas con doble hilera de rodamientos y pistas de rodadura tratadas con el proceso patentado de endurecimiento termoquímico Rollon-Nox.
Estas guías lineales pueden soportar fácilmente carreras variables, altas velocidades y ciclos estresantes incluso en aplicaciones verticales, y en plena extensión con la carga máxima aplicada.
Estas guías tienen elementos rodantes de gran tamaño, con un diámetro máximo de hasta 31.5 mm y cursores internos equipados con rascadores y sistemas de lubricación, para una excelente calidad de deslizamiento.
El tratamiento de templado por inducción proporciona la máxima resistencia de la guía hasta 2 millones de ciclos mediante una dureza de la superficie de la guía de 60-62 HRC.
Los rodamientos de doble hilera permiten que el sistema soporte cargas pesadas, hasta unos 780 kg por par para las pistas de mayor rendimiento, como la TLR 43.
Por último, las guías Telerace están diseñadas con una ligera rotación de los elementos de la guía con respecto al elemento intermedio. Esto les permite manejar desalineaciones de hasta 2° en el paralelismo y hasta 3 mm en la planitud.
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